Ya estamos de vuelta. Bueno, ayer llegamos de pasar el fin de semana en Frankfurt. Una caña de viaje que paso a relatar sin dar muchos detalles... Sino tendría que ponerle la coletilla "No apto para menores de 15 años..." detrás del título. Y no es plan.
-El viernes, tras una nevada en condiciones nos pusimos rumbo a Wiesbaden. Ciudad sita entre Frankfurt Main y Mainz, dónde iba a tener lugar la fiestecilla de la universidad a la cual Jasmin nos había invitado. Angelillo, Felipe, Iván, Toño y el menda eramos los pirados que se iban de fiesta a Frankfurt.
El viaje resultó pesado. Pesado por los 3 transbordos que tuvimos que hacer y más pesado ahún tras perder un tren. Pero el cachondeo reinante junto con la continua ingesta de patatas, bocatas y sandwiches hicieron que el viaje pasase bastante rápido. Igual tuvo algo que ver el kalimochete con el que pasábamos los gusanitos...
La cuestión es que llegamos a las 10 a Wiesbaden dónde Jasmin nos esperaba y nos condujo a la universidad dónde ya había comenzado la fiesta. La fiesta en sí... mucho Hip-Hop y cervezas baratas. ¿Conclusión? Beber las cervezas necesarias hasta que uno sea capaz de abstraerse de la música. Hecho que no nos llevó más de media hora ;-) A partir de ahí, y tras comprobar que Jasmin había decidido no salir esa noche con sus amigas empezó a desmadrarse un poquillo la fiesta, siempre sin liarla, claro está.
El primer cachondeo generalizado llegó cuando Felipe(muy mono él con su gorrito) decidió ponérselo. Hasta aquí nada raro, salvo por el detalle de ir a ponerse el gorro con la misma mano que sujetaba la cerveza. Total, que se derramó toda la cerveza por la cabeza... Menudas risas.
A partir de ese momento decidimos hacerle la competencia a las gogos que bailaban por los podiums. Como todo en este mundo, la clave del éxito está en enseñar carne, y si nos ceñimos exclusivamente a la cantidad de carne que enseñaban unas y la que enseñábamos nosotros... lógicamente causamos sensación. Al final de la noche decidimos buscarnos alojamiento para esa noche, cada uno por su lado. Pero el daño ya estaba hecho y no había cuasi-ninguna chica de buen ver que nos echase una mano(ó las dos...).
Tras salir de la fiesta, y despedirnos de Jasmin. No encontramos mejor cosa que hacer con -2ºC que una batalla de bolas de nieve, divetidísima. Luego siguió una batalla de bolas de nieve, esta vez en paños menores, aún más divertida si cabe. Eso sí, en el momento que llegó un coche de policía a toda leche a por nosotros...alguno empezó a correr. Pero, tras percatarse el policía que no estábamos violando a Felipe, sino que simplemente se trataba de la "típica" guerra de bolas de nieve a las 6 de la mañana bajo un frío de cojones, decidió marcharse.
Tras decidir mis pelotillas que ya tenían suficiente frío por esa noche y que querían descansar. De ahí que me diese un bajón de órdago(creo que también debió influir que mi cazadora estuviese completamente mojada...). Decidimos coger un taxi hasta el albergue. La entrada al albergue fue... igual de tranquilita(no entiendo como nos abrieron la puerta...). . Menos mal que nos dieron al habitación alas 7 de la mañana que sino... (de todas maneras, ese suelo del portal no estaba tan duro). Al llegar a la habitación... mis pelotillas y las de los demás entraron en calor y continuamos la fiesta hasta... las tantas. Eso si, ya teníamos otra montada para la tarde en el propio albergue(lástima que las chicas de la limpieza se echaran atras en el último momento). La fiesta era la conocidísima y siempre resultona "Angebot Party".
-Al día siguiente(bueno, tras dormir unas horitas) decidimos hacer turismo por Frankfurt. ¿Y que hay en Frankfurt? Pues rascacielos y un bonito mercado de Navidad. Ah, y un frío de la leche. Eso también. Tras nuestro paseo por Frankfurt Felipe, Iván y Toño dejaron constancia de nuestro paso por Frankfurt con un insigne dibujo en la nieve: " PAMPLONA. Ilustrísima y excelentísima ciudad en la cual...", Lastima que solamente se pudiese apreciar "PAMPLONA"... ;-)